"Ni lagrimas ni culpa"
“Ni lágrimas ni culpa” es el nuevo libro/objeto de la artista Zaida González Ríos, basado en su última exposición, un archivo de su historia íntima, sus protagonistas, ya sean personas o emociones, sentimientos y recuerdos vívidos.
Mostrar los “conflictos propios que también pasan a ser universales”, es la idea fuerza en la búsqueda de esta artista, que tan bien podemos comprender en el documental realizado por el proyecto Rectángulo en el ojo.
La exposición del mismo nombre estuvo abierta al público en el año 2016, pero la artista quería ir más allá de ese formato que “pasa rápido, pocos lo ven y luego queda todo desmontado en cajas malográndose”.
En palabras de la autora, este nuevo libro/objeto busca “dar un valor más asequible y trascendental al trabajo realizado, se puede difundir y apreciar con mayor intimidad la obra, las veces que uno quiera. El libro se valora como objeto, con una edición y diseño especial para el cuerpo de su contenido”.
Este sentido profundo, merece el trabajo dedicado, que a su vez refleja su lenguaje característico articulado en sus imágenes, donde el trabajo laborioso del recorte, pegado, calco y dibujo manual puede vincularse con su crítica a la pérdida de libertad de la vida y de las cosas que ha conllevado el sistema neoliberal, sus ritmos homogeneizantes y vertiginosos.
El libro “Ni lágrimas ni culpa” fue presentado en el Archivo Nacional de Chile el jueves 13 de julio y participaron Diego Argote y Rocío Hormázabal que junto a la autora, saliendo de lo teórico, realizaron una presentación ritual, donde simbolizaron distintos estados de la luna y de la artista. Asimismo, participó Jorge González, su padre.
En sintonía con el ejercicio autobiográfico, Zaida González quiso presentar su libro en el mismo sitio donde el 2015 participó con su trabajo en una jornada homenaje a Hija de Perra llamada "De una raza sospechosa". Sumado a ello, reconoce este espacio como un lugar de activismo feminista conectado con su discurso.
Le preguntamos qué pasó en ella después del día de la presentación, a lo que respondió: “creo que logré llegar al punto en que abandoné tapujos y trabajé de la manera más transparente y honesta frente a la autobiografía como también al reconocimiento de personas que ya no están y que merecen tributo, como otras que están en vida, pero que nos han dejado de cierta forma producto de la enfermedad”.
“Ni lágrimas ni culpa” incluye además otras voces, un escrito de Hija de Perra, un poema de Julio Núñez, un poema e ilustración de Jorge González, su hermano, e ilustraciones de Gatuti González y Andrés B Zeta.
Zaida González, recibió el 2012 el Premio a la Fotografía Joven Rodrigo Rojas de Negri del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y el Premio a la Mejor Artista Joven en la IV Feria Internacional de Arte Contemporáneo ARTVILNIUS´13 de Lituania, siendo también nominada a los premios Altazor. Sus libros anteriores son: Las novias de Antonio (2009), Recuérdame al morir con mi último latido (2010) y Zaida González De Guarda (2011).