En Chile, la lucha por la igualdad política, jurídica y laboral entre hombres y mujeres, tuvo en el "Movimiento Pro- Emancipación de las Mujeres de Chile, "MEMCH", uno de sus principales exponentes. Desde su fundación, el 11 de mayo de 1935, marcó la agenda política y social en temas como: el sufragio femenino universal, el acceso a los derechos civiles y políticos, a la protección social de la maternidad obrera (dado el aumento de la mano de obra femenina en el país). La organización, se caracterizó por tener congregar a mujeres de diferentes clases sociales, a través de una red de comités locales que funcionaron en gran parte del territorio nacional y por fortalecer la lucha por el acceso a la educación superior de las mujeres, generando una plataforma de participación en el espacio público para las mujeres y sus reivindicaciones.
El MEMCH, fue liderado por mujeres que han logrado un cierto reconocimiento histórico por su trayectoria política, feminista e intelectual, entre ellas Elena Caffarena, Olga Poblete y Graciela Mandujano, pero también por mujeres obreras y trabajadoras como Norma contreras y otra .
El periódico "La Mujer Nueva" fue el principal medio de expresión de los preceptos ideológicos y demandas políticas y sociales del MEMCH. Además, mediante esta publicación, se denunciaron las condiciones de vida de las familias pobres urbanas, afectadas por numerosos problemas como el acceso alcantarillado, la red eléctrica, la atención primaria en salud, la educación, ocasionados por el aumento de habitantes producto de los procesos migratoria campo-ciudad.
El documento que presentamos hoy, pertenece a la colección de cartas de Elena Caffarena insertas en el Archivo Mujeres y Géneros, del Archivo Nacional Histórico. Es un texto mecanografiado titulado "A las mujeres", fue redactado el 28 de mayo de 1935, diecisiete días después de la fundación de este movimiento. En el relato, se insta a las mujeres a organizarse y trabajar unitariamente, en torno al movimiento, con miras a su emancipación integral, entendida ésta, en las dimensiones: biológica, económica, jurídica y social. Primero en el plano biológico, preocupan los embarazos y partos repetidos de las mujeres obreras; el aborto; la desnutrición y la maternidad como opción voluntaria y consciente, segundo, en el aspecto económico: la doble jornada de trabajo de las mujeres; la igualdad de sueldos y el salario mínimo. En el tercero, el derecho de las mujeres a trabajar en diversos rubros, sin exclusiones; la prostitución; el hambre y el abandono, como también, en la plenitud de derechos civiles y políticos; la igualdad ante la ley de todos los hijos; el divorcio; la investigación de la paternidad y la dictación de un Código del Niño y por último, en lo social, la educación igualitaria y la vivienda digna. Constituyendo de esta manera, las preocupaciones políticas y los diversos ámbitos de acción del MEMCH.
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