En la Biblioteca de Santiago, el subsecretario (s) del Ministerio de Obras Públicas (MOP), Javier Osorio, la directora de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, Claudia Silva, y el director (TyP) de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), Alan Trampe, encabezaron la premiación del "Concurso de Anteproyectos de Arquitectura para la Biblioteca y el Archivo Regional de Magallanes", el que será construido en la ex cárcel de Punta Arenas, inmueble formalmente destinado a la Dibam por el Ministerio de Bienes Nacionales.

La propuesta ganadora fue la de Rodrigo Aguilar Pérez y su equipo compuesto por cinco profesionales. Un proyecto que en palabras del jurado cumplió con todos los requerimientos, porque "es austero que configura la manzana original con edificios distintos (...) Rescata la parte histórica del predio, y respeta las edificaciones patrimoniales, esto es, la interviene muy poco", señaló Emilio de la Cerda, representante de los concursante en el jurado. Además, precisó que el diseño es abordable, estratégicamente nítido, lo que es muy importante ya que se hace cargo de una futura ejecución, es decir, posee un nivel de realidad. "Es un proyecto potente, contemporáneo y tranquilo", concluyó.

El segundo y tercer lugares correspondieron a las oficinas Sebastián Irarrázaval y Arturo Lyon, respectivamente. En tanto, recibieron menciones honrosas los trabajos de Humberto Elliot, y Cecilia Puga.

Durante la ceremonia intervino Claudia Silva, quien manifestó que: "Tuvimos una convocatoria inédita para los registros del Departamento de Patrimonio de la Dirección de Arquitectura, ya que fueron 65 las propuestas que llegaron de distintas partes del país". Y agregó que: "Se trata de un hito importante para nosotros como Dirección de Arquitectura del MOP, ya que gran parte de nuestra labor se centra en la recuperación y puesta en valor de innumerables emblemas a lo largo del país (...) Pero también nos hacemos cargo de la construcción de otros nuevos".

En tanto, Alan Trampe manifestó que para la Dibam es gratificante efectuar un nuevo certamen en colaboración con el MOP: "Este concurso es simbólico, porque si bien hemos realizado otros como el del Palacio Pereira y la ampliación del Museo Histórico Nacional, es el primero que se lleva a cabo para un proyecto regional, que además es tan lejana como Magallanes". Explicó que se trata de una iniciativa con mayor complejidad que otras, pues une la construcción al mismo tiempo de una biblioteca y un archivo.

El anteproyecto ganador del concurso recibe un premio de 25 millones de pesos ($25.000.000), y la oficina ganadora será contratada para el desarrollo definitivo de los proyectos de arquitectura y especialidades, cuya elaboración tendrá un costo total de 165 millones setecientos veintiún mil de pesos ($165.721.000), los cuales esperan ser finalizados en 2016. Posteriormente, se llamará a licitación para la ejecución de las obras, las que se estima estarán concluidas en diciembre de 2018.

Una deuda con Magallanes

La creación de un Archivo Regional que permita tener un fácil y rápido acceso a documentación que actualmente se obtiene principalmente en Santiago, y que dice relación con el patrimonio e historia de las familias del extremo sur del país. Asimismo es fundamental para la zona contar con la creación de una Biblioteca Pública Regional responde a la necesidad de brindar espacios culturales y patrimoniales a la comunidad magallánica, otorgándole áreas de encuentro, información, esparcimiento y educación.

La iniciativa plantea intervenir la ex Penitenciaría de Punta Arenas, Monumento Histórico ubicado en una de las manzanas que rodean la Plaza Muñoz Gamero, y representativo del período de crecimiento y auge económico de la ciudad. El inmueble está actualmente en desuso, y si bien a nivel estructural su estado de conservación es regular, el estado de sus terminaciones e instalaciones es deficiente.

En términos generales, el proyecto considera la restauración de la edificación patrimonial existente, la demolición de elementos no originales, la ejecución de una ampliación mediante una edificación de obra nueva hacia calle Chiloé, y la restitución del volumen del pensionado, utilizando una arquitectura contemporánea que respete la volumetría del edificio original. La obra final tendrá una superficie total de aproximadamente de 5.500 m2.